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| Tema: Joel Peter Witkin: Arte No Apto Para... ¿Puristas? Sáb Ago 11, 2007 1:06 am | |
| Pido disculpas a quienes se sientan ofendidos por este post. Pero creo que lo peor que se puede hacer es poner límites al arte, porque sea como sea, este siempre busca decirnos algo. Incluso de las formas más duras y con los materiales más inverosímiles.Joel-Peter Witkin nació el 13 de Septiembre de 1939, en Brooklyn, New York, su padre era judío, y su madre una católica que trabajó en una planta de elaboración de DDT. Sus padres no podían superar sus diferencias religiosas y se divorciaron cuando Witkin era joven, quedandose a vivir con su madre. Estudió en la escuela de Santa Cecilia en Brooklyn, y en la secundaria Grover Cleveland. Witkin dice que sus sensibilidades visuales únicas comenzaron a surgir cuando, como niño pequeño, vio un horrible accidente de coche delante de su hogar, en el cual descabezaron a una pequeña niña. Recuerda el balanceo de pies, sus ojos muertos mirando fijamente hacia arriba. También cita al fotógrafo forense Weegee como influencia temprana. Witkin era y es un fotógrafo de la condición humana. Por más de veinte años ha perseguido la espiritualidad y cómo afecta ésta el mundo físico en el cual existimos. Encontrando belleza dentro de lo grotesco, Witkin persigue esta compleja idea a través de los desplazados: gente rechazada por la sociedad -espectáculos humanos, incluyendo hermafroditas, enanos, amputados, androginos, gente con deformidades fisicas, fetichistas y "cualquier mito vivo. . . cualquier persona que lleve las heridas de Cristo" según sus propias palabras. Referencia constante de su obra son las pinturas de El Bosco, Goya, Velasquez, Miro, Botticelli y Picasso. Usando imágenes y símbolos a partir del pasado, Witkin celebra nuestra historia mientras constantemente redefine su actual contexto día a día. En morgues y asilos insanos alrededor del mundo, Witkin busca a sus modelos, que, en el fondo, representan al artista mismo. Las fotografías que resultan son hermosas, grotescas, con la belleza horrible que tiene todo tabú. Witkin comienza cada imagen bosquejando sus ideas en el papel, perfeccionando cada detalle, arreglando la escena antes de que él consiga en el estudio plasmar su elaborado retablo. Una vez fotografiado, Witkin pasará horas en el cuarto oscuro, rasguñando y perforando sus negativos, transformándolos en las imágenes que su mirada primero imaginó.Respecto a su foto “Hombre de Cristal” Witkin dice: “Permanecí en Ciudad de México por cuatro días extras produciendo ‘Hombre de Cristal’, porque no conseguía el cuerpo deseado. Cuando los cuerpos se traen de la calle, hay una duda en cuanto a cómo la persona murió. La gente de la calle suele ser encontrada días más tarde, lo que dificulta determinar la causa. Los empleados de la morgue salen cada día en sus carros blancos a recoger muertos. Cuando son encontrados, los cuerpos son lanzados en los carros, boca abajo. Sus narices se quiebran. Los carros se cargan con quizá seis personas, y apenas caben uno encima de otro. Cuando llegan a la morgue todos se tiran hacia dentro. Se toman sus identidades, se les quitan sus ropas, y se guardan los expedientes. Cuando permanecí esos días adicionales en México, sabía que algo iba a suceder. Contesté una llamada. Habían recogido cuatro hombres , el día antes de que fuera a irme. Fui al sotano del hospital con mi intérprete. Un automovil había atropellado al primer cadaver que ví; no estaba en buena forma. El otro individuo era un hombre viejo, al que habían apuñalado hasta la muerte. El otro individuo, era un punk, nada bueno visualmente. No obstante, cuando vi al último individuo, dije, "lo deseo." Estoy en este sitio con un individuo muerto. Lo estoy apoyando para arriba, y pongo un pescado en su mano como base de apoyo, y estoy comprobando la iluminación. Entonces lo coloco derecho, y tomo algunas fotografías, pero que apenas podrían acompañar una ficha médica. Entonces les pido que me lo den despues de la autopsia. ¡Y tan pronto como él está siendo abierto, comienza a cambiar! Él está sobre la mesa, y está cambiando. Me giro hacia mi traductor mexicano, que es un hombre muy brillante, y hemos visto la misma cosa. Él dice, "lo están juzgando. Ahora están juzgando a este individuo." Repentinamente, él no ya no es sólo un vago más. Se ha transfigurado en la mesa, en la mesa de la autopsia. Le digo al funcionario, "no lo lave abajo. Deseo toda la sangre de las suturas." Generalmente, les abren el cráneo y quitan el cerebro. Ponen a veces el cerebro detrás. Otras veces ponen un trapo o un papel adentro, o quizás un periodico, para mantener la forma de la carne. En este caso pusieron el cerebro detrás. Cuando llevaban el cerebro, dije, "miren este cerebro, puede haber contenido pensamientos del mal, pero sin embargo lo juzgaron, ¡él ahora es una presencia distinta!" Cuando lo recuperé, y lo puse en este sitio, conseguí esta silla, y lo fotografié sentado, pasé una hora y media con él; parecía un San Sebastian. Parecía una persona que tenía infinita tolerancia. Sus dedos, juro por dios, habían crecido 50 por ciento. Eran elegantes. Eran los dedos más largos en un hombre que he visto. Era como si alcanzaran para la eternidad.” Al cerebro normal del peatón sexual medio, el látex, el cuero negro y las dominatrix teatrales y calamitosas le parecen cosas mas tontas que eróticas. El perverso verdadero, sin embargo, necesita y cree en una maldad y en un infierno para disfrutar. Si has mirado a una mujer manejar un par de zapatos de tacón alto, mientras ries nerviosamente incómodo, es que entiendes a Witkin. Creo que Joel-Peter Witkin es un pervertido verdadero. Cuáles son sus predilecciones sexuales, no sabría decirlo. Sus trabajos han sido descritos por la crítica Marina Isola como "una mezcla entre Jeronimus Bosch y la “Texas Chainsaw Massacre”.Él es el rey de las imágenes irreales, y es uno de los artistas preferidos del movimiento gótico, desde que logró la aclamación pública en los años 80 con sus cadáveres delicadamente presentados y sus airosos mutantes desnudos. El mundo visual de Witkin evoca el de un empresario de pompas fúnebres del siglo XIX, mezclado con un cuento de hadas antiguo, y particularmente severo.El arte tan desafiante de Witkin es marginado a menudo. Pero a pesar de su rudeza, su trabajo supera el aprecio y la exposición limitados que la fotografía del arte recibe generalmente, Chile inclusive. En EE.UU. y Europa los dueños de galerías y los distribuidores del arte compiten por los trabajos del fotógrafo americano.Reproducimos a continuación algunos extractos de una entrevista a Witkin realizada el año pasado.Entrevistador: ¿De los diversos tipos de lecturas psíquicas que se ha hecho, cual ha sido la mejor? Witkin: No puedo realmente hacer esa distinción. Realmente he tenido solamente una lectura, del Karma...no, realmente, me hice una lectura de la palma de la mano, alrededor de hace un año por una mujer negra muy hermosa. Ella miró mi palma y dijo, ' usted va a vivir por siempre. ¡Su linea de vida va hasta su codo!' E: Bien, eso es bueno. W: No sé si demasiado bueno. Lo triste es que se nos estamos desconectando cada vez más con el sentido de la maravilla, del misterio y del destino. No puedo vivir una vida que piensa que la galaxia, el cosmos, es una cierta clase de “accidente anormal”.E: A pesar de la intensidad de sus fotografías, una línea del humor torcido viene a través de su presentación. Muchos de los títulos son absolutamente incongruente con las imágenes mismas. W: En lo cotidiano real de mi trabajo, soy muy, muy serio. Pero durante las fotografías -por lo menos de la gente viva- hay generalmente ratos de mucha histeria. Pongo a la gente en situaciones en que ella tiene que conectar básicamente con su psique. El humor es parte de un rasgo humano muy básico de la supervivencia. Si una persona no ve humor en las cosas, una gran parte de su acercamiento a la realidad disminuye. E: ¿Su trabajo ha recibido siempre reacciones inesperadas o especialmente alguna respuesta absurda que recuerde? W: Sí, en un artículo que fue impreso recientemente criticando una fotografía. En la foto, hay un hombre tuerto y otro que está a punto de poner su pene en la cuenca ocular del hombre (historia de la fotografía comercial en América del sur, 1984), y el escritor pensó que era una papa! ( risas) no podría creerlo, “eso”… una papa. (Entrevista por Christine Alevizakis, extractada y traducida por César Parra, o sea yo... [size=12]Página No Oficial (Entren bajo su responsabilidad): http://www.zona10.com.mx/autores/Joel%20Peter%20Witkin/index.htm | |
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